Buenas buenas, queridas y queridos viandantes.
Hoy estamos volviendo a las clases de la Diplomatura en Ceremonial y Protocolo que habíamos iniciado el ciclo lectivo pasado, y que los invito a repasar en sus anteriores apariciones:
Módulo 1: Unidad 1: El Protocolo de Cama. Qué decir y qué no decir después del clímax
Módulo 1 – Unidad 2: “El Protocolo de Cama. Qué decir y qué no decir durante el acto”
Módulo 1: El Protocolo de Cama – Unidad 3: “La Primera Quedada a Dormir”
Módulo 2: El Protocolo de Tiroteo – Unidad 4: “El Piropo”
Módulo 3: Las Relaciones – Unidad 7 – Los Regalos
Módulo 3: Las Relaciones – Unidad 8 – El Tiroteo Inicial No Presencial
Después de ese breve repaso hoy vamos a meternos en un módulo que en su momento tras arduas discusiones con el decano Anderton y más arduas aún con mi colega Margarita Pérez Osorio decidimos incorporar a la currícula: algunos momentos o instancias en las interacciones humanas que uno quizás no domina a la perfección y que no necesariamente están relacionadas con el tiroteo o con las parejas, pero que pueden coadyuvar al mejor entendimiento humano y a un mejor relacionamiento interpersonal.
Tras largo batallar y batallar llegamos a la conclusión que debíamos incluirlo y no privarles a ustedes de esta oportunidad, pero claro, los apuntes ya estaban escritos y el centro de estudiantes los había impreso ya.
Es por eso que surge este módulo intermedio denominado Módulo 2 y 1/2, el Protocolo de Interacción Humana, y la presente unidad 5: “El Insulto”
El Insulto es una expresión peyorativa, peleadora, degradante para con alguien, pero no tiene por qué serlo, en realidad, si uno aplica el protocolo del insulto de la manera correcta.
Primero y principal Quiero hacer una aclaración: El Presente Post contiene palabras subidas de tono y potencialmente ofensivas, a modo ilustrativo, si lo desean, en sus mentes agreguen un sonidito tipo pitido con cada una de ellas, ya que no es intención de la Umass que nadie se ofenda.
En realidad el insulto es una situación que disgusta tanto a quien lo profiere como a quien lo recibe; y es por ello que siempre es mejor realizarlos de la mejor manera para evitar potenciales conflictos y que el día de ambas personas no quede arruinado por una simple discusión o malentendido.
De esta manera siempre un insulto que sigue nuestro ceremonial y protocolo hace que el mensaje sea disparado con la suficiente fuerza como para dejar tranquilo al insultante que dijo lo que necesitaba decir sin caer en la posibilidad de una riña mayor y un posterior funesto desarrollo de la discusión.
No sea Grosero, Evite meterse con la familia del insultado
No está bien enviar a alguien a la remanida (piiip) de su hermana, ya que eso puede generarle un brote de violencia importante a la otra persona y derivar en golpes y escenas de combate que bien podrían haberse evitado con un leve cambio en el insulto por un tono más personalizado, ya que como bien sabemos, si la persona a la que estamos insultando es a quien consideramos un boludo a cuerda, su señora hermana probablemente no tenga nada que ver. No haga que esa pobre mujer se haga cargo de la pelotudez de su hermano. Cámbielo por un insulto dirigido a quien estamos insultando.
Insulte con altura
Nunca se rebaje a un mismo nivel de la cagada que la otra persona se haya mandado con usted. Un insulto lanzado con categoría deja en el insultante una sensación mucho más liberadora que el envío del insultado a los órganos reproductores de una hembra de ave habladora verdecita.
Un insulto que deja al insultado pensando si ha sido insultado o no es una victoria del insultante, y además logra que no haga falta que quien lo lanzó se retire del salón ni deje de almorzar con Mirtha Legrand.
Sea un poeta del insulto
No hay mejor insulto que un piropo con la suficiente ironía para que deje dudas de su intención (Doble, triple o lo que sea, pero básicamente malvada).
Si usted logra decir un insulto al que la otra persona deba responderle con un “gracias”, usted ha logrado el mejor nivel insultivo posible.
Ya lo decía Whipple: “Una ironía es un insulto lanzado bajo la forma de un cumplido”. Y otro pensador dijo “La ironía es el alma del ingenio”.
Sea inteligente. Insulte con altura y logrará que sus golpes sean más duros y certeros, sin necesidad de derramar sangre ni avergonzar señoras transeúntes oyentes eventuales.
Insulte sonriendo, con la voz serena y la mirada calma
Si logra este cóctel, usted puede estar enviando a alguien a la soberana loma del oj(piiip) y que la otra persona tenga ganas de ir allí. Es un insulto efectivo el que usted acaba de lanzar.
No sea Desubicado, insulte Políticamente correcto
Jamás lance un insulto referido a la raza, religión, condición social, impedimento físico, elección sexual. Concéntrese en la persona a insultar y no en su grupo étnico, social o antopológico.
Recuerde que hay pelotudos/as en todos los colectivos humanos pero también gente que vale la pena. Si su intención es putear a Pepito, putee a Pepito y no al grupo del que Pepito forma parte. No hace falta ofender a terceros para que su insulto sea más eficaz.
Recuerde concentrarse en el insultado, seguramente habrá pelotudez de sobra para escarbar.
Cuídese quién es su auditorio
Antes de caer en un ataque de furia, transformarse en un monstruo verde de tres metros y medio de altura que rompe toda su ropa a excepción de (extrañamente) sus calzoncillos, tenga en cuenta quién lo rodea, ya que deberá morigerar sus puteadas si hay niños cerca sobre todo, o si hay personas ajenas a la situación que desenadenó la necesidad de decir una tracalada de guarangadas.
Cambie “mierda” por “miércoles”, “La gran puta” por “Pucha”, Diga “Recontra”, “Me caigo y me levanto” y cosas similares.
Los niños deben educarse en un ambiente libre de malas palabras y así recibir la buena influencia de una sana televisión y un ambiente escolar ingenuo para que lleguen a adultos tan respetuosos como Suizo introvertido.
Si en su auditorio no hay inconvenientes, dé rienda suelta a su creatividad y a su lengua bífida y cloacal.
Si es un autoinsulto, no vocifere
Supongamos que tuvo la mala suerte de agarrarse un dedo con un martillazo porque le erró al clavo que intentaba ser soporte de un bello cuadro de Malanca.
No Grite a los cuatro vientos cual confesión de amor de obra shakesperiana su insulto. Tampoco lo guarde.
Simplemente láncelo con la boca cerrada y apretando los dientes.
De esta manera su insulto tras machucarse un dedo de un martillazo debería sonar algo así:
Pro la rcnch dl lr pta y la rmil prió q pdz d cldo q soy n me pdo habr chobost asil ddo.
Evite patear a su vez que putea, ya que sólo logrará sumar un dedo del pie al machucón.
Esté Preparado
Siempre tenga una batería de insultos listos para no necesitar esperar iluminarse para lograr esa puteada que tanto añora decirle:
Algunos ejemplos con el mejor estilo Roberto Pettinato:
1- Sos un resto humano que ni el basurero recogería.
2- Salí de acá, sos un borracho… vos en vez de mandar la ropa a la tintorería la tenés que hacer destilar!
3- Sos tan miserable que sos capaz de sacar a tus chicos de la escuela para que no presten ni atención!
4- Rata: Nunca disfrutás del postre por lo cerca que está de la cuenta!
5- Sos un bebedor (o fumador) social: Sólo tomás (fumás) si otro paga.
6- La cigüeña después que te trajo tuvo que ir derecho a confesarse.
7- Lo más grande que tenés es tu número de DNI.
8- Sos un muerto… vos tenés turno semanal fijo para que te hagan autopsias los estudiantes de medicina.
9- Sos tan insignificante que ni vale la pena ignorarte.
10- Tengo una basura en el ojo… Vos.
11- Sos tan aburrido que seguro si te clavás un guante se te duerme la mano!
12- Si te vas de campamento son los osos los que hacen fuego para que no te les acerqués. Fieraaaa!
13- Cocinás tan mal que en tu casa rezan después de la cena
14- Ni un boomerang querría volver a estar con vos.
15- Nunca me voy a olvidar el momento en que te conocí… y mirá que lo intento.
16- Vos no tenés corazón ni jugando al poker.
17- Sos una persona muy culta y variada: Podés aburrir con muchos temas diversos.
18- Lo que te voy a decir va a sonar a una idiotez, pero te lo tengo que decir así para que lo entiendas.
19- Si algún día necesitás un amigo, no lo dudes… comprate un perro!
20- ¿No amás a la naturaleza? Más allá de lo que te hizo a vos, obvio.
21- ¿Qué hacés todavía acá… la morgue no cierra de noche?
22- Ahora estoy ocupado… te molesta si te ignoro después.
23- Si algo que dije te ofendió… creeme!
24- Por supuesto que te estoy escuchando… o no se nota la cara de embole que tengo?
25- ¿Qué problema hay si me equivoco?… soy humano ¿O acaso a vos no te gustaría serlo?
Bien queridas y queridos viandantes. Espero que lo hayan disfrutado y dejen sus comentarios sobre la unidad de hoy.
Ahora los dejo con un par de bonus tracks.
Primero que nada, los Viandantitos ilustran el tema de hoy.
Y para cerrar, más de Las Locas locas maneras de llegar a la Cátedra
Ahora sí, hasta la próxima.
Saludos, cariños, besos y abrazos
Dixit, insultat pero con alturat
Pulpo